El primer proyecto vía RIGI, pero el inversor es YPF
Por ahora, el éxito del régimen se prueba con el Gobierno de ambos lados del mostrador. El parque tendrá una capacidad instalada de 305 megavatios con un desembolso total de más de US$ 211 millones, a realizarse en dos etapas.
El Gobierno nacional oficializó este miércoles la aprobación del primer proyecto que ingresará al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) por un monto apenas superior a los US$211 millones, mediante la Resolución 1/2025 publicada en el Boletín Oficial.
La noticia fue anunciada con entusiasmo desde el Ministerio de Economía, buscando anotarle una victoria al régimen tan debatido en el marco de la Ley de Bases, aunque la potencia de la noticia puede sonar relativa al observar que el primer inversor seducido es ni más ni menos que YPF, companía cuyo accionista mayoritario es el Estado nacional.
El proyecto que obtuvo el aval gubernamental definitivo al cumplimentar todos los pasos previstos es el “Parque Solar El Quemado y Anexos” por una capacidad instalada total de 305 megavatios (MW), según precisó la cartera que conduce Luis Caputo; que precisó que se desarrollará en la provincia de Mendoza a cargo de la empresa Luz del Campo S.A / YPF Luz.
La urgencia por exhibir algún resultado expuso al Gobierno, que aún atribuyéndose el carácter de antiestatista continúa gestionando la petrolera de mayoría estatal. En este caso, la administración de Javier Milei se encontró de ambos lados del mostrador, impulsando el RIGI para atraer inversiones y apuntalando el desembolso para probar su éxito.
[Los detalles del proyecto]
Respecto a lo procedimental, se informó que la implementación se llevará a cabo en dos etapas: en la primera se avanzará con la instalación de paneles solares bifaciales en 350 hectáreas por una capacidad instalada de 200 MW, mientras que en la segunda instancia se prevé completar la capacidad total planeada.
El proyecto implica una inversión total de US$211.600.072, de los cuales en el primer y segundo año contados desde la fecha de solicitud de adhesión se emplearán US$204.544.000, “cumplimentándose el 40% del monto mínimo de inversión definido para el sector de energía”.
Asimismo, quedó estipulado que, de la inversión total, unos US$94.076.795 serán abonados a proveedores del exterior, mientras que la suma restante de US$117.523.278 será cancelada a proveedores locales. Además, se fijó que la fecha límite comprometida para alcanzar el monto mínimo de inversión en activos computables es el 30 de enero de 2027.
En el análisis realizado para determinar la viabilidad de la inversión, el Banco Central consideró que la misma “no afecta la sostenibilidad del sector externo ni tampoco resulta significativo su impacto en las reservas internacionales” y también señaló que “no se considera que el proyecto pueda afectar negativamente, por sus efectos cambiarios, los objetivos de desarrollo económico y estabilidad financiera”.
En paralelo, la entidad bancaria sostuvo que “en el caso que se diera la sustitución de importaciones planteada una vez que entra en producción, el balance cambiario resultaría positivo considerando los tres años iniciales del proyecto, ya que los gastos de operación a partir de la puesta en marcha son locales”.
Al mismo tiempo, la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA) y la Secretaría de Energía evaluaron la iniciativa y concluyeron que la misma “cumple con los requisitos y objetivos del RIGI”.