La Cuenca San Jorge en el nuevo mapa energético de la Argentina
La reconfiguración del sector energético encuentra a una cuenca históricamente clave en un momento de transformación. Cuáles son los planes en Chubut y Santa Cruz.
En tiempos en que toda la atención del sector energético se concentra en Vaca Muerta, la Cuenca del Golfo San Jorge enfrenta el desafío de sostener su protagonismo. Chubut y el norte de Santa Cruz aportan hoy apenas el 23% del petróleo del país y aunque quedó muy lejos de lo que hasta pocos años atrás representaba más del doble de ese valor, aún tiene una porción de mercado para sostener y consolidar.
Desde que YPF anunció el Plan Andes, a comienzos de 2024, para retirarse de las áreas maduras del país, activó una transformación que incluyó también a otras operadoras y empresas de servicios especiales. La consecuencia se refleja en un achicamiento del mercado laboral, que oscila entre 5.500 y 5.600 ‘retiros voluntarios’ entre ambas provincias, en un achicamiento de la actividad que todavía no encontró su piso.
Hoy, el objetivo es encontrar un nuevo punto de equilibrio. Quienes explican la crisis, como el ministro de Hidrocarburos de Chubut, Federico Ponce, no dejan de mencionar también el contexto internacional y a macroeconomía nacional. Precios del petróleo con tendencia a la baja y un tipo de cambio atrasado aceleraron la curva de declino, cuya retracción geológica se remonta a varios años atrás.
Quedó así en evidencia un sobredimensionamiento del mercado que hoy se reconoce desde ámbitos técnicos y hasta gremiales, pero con una impacto económico y social cuyas consecuencias todavía no pueden medirse, pero que recuerdan a la privatización de Y.P.F., a principios de los años 90.
Oportunidades para Chubut y reclamo a Nación
Desde el punto de vista de la producción, Chubut encuentra referencias para encontrar un camino de salida. Con una producción que ronda los 20.000 metros cúbicos diarios, el crudo Escalante, de densidad media y bajo contenido de azufre, es un recurso altamente demandado en el mercado internacional, lo que abre la puerta a nuevas expectativas de exportación.
El ministro Ponce lo sintetizó recientemente en Comodoro Rivadavia: “Se trata de un crudo con una cotización diferencial, que en otros tiempos se comercializó con descuento de hasta 10 dólares por barrril, pero que hoy vuelve a ser valorado por su calidad y condiciones de procesamiento”, destacó.
El mismo funcionario morigeró el impacto geológico, al detallar que mientras el promedio de caída del crudo convencional en los últimos 6 años fue del 30%, en esta provincia ese ritmo de retracción equivale a la mitad.
Ponce ponderó la serie de medidas adoptadas para estabilizar la curva de producción, como reducción de regalías para áreas marginales y la gestión para que Nación elimine aranceles de importación de polímeros, clave para la recuperación terciaria a la que se aferran los nuevos proyectos productivos.
El gobernador Ignacio Torres puso sobre la mesa dos reclamos centrales a Nación: una ley de incentivos a las cuencas maduras y la eliminación de retenciones a las exportaciones, como medida clave para sostener la competitividad en el mercado externo.
Todavía quedan interrogantes por resolver. Está en pleno proceso de venta el área Manantiales Behr, último activo de YPF en Chubut, mientras el entramado de pymes regionales busca adaptarse -en una situación que desató conflictos- a las nuevas condiciones que impuso PECOM, que compró los bloques Trébol y Campamento Central con promesa de revertir el declino mediante terciaria.
La perspectiva del No Convencional, iniciada por PAE en la formación D-129 y el reciente anuncio de un segundo pozo exploratorio, terminará de definir si hay nuevos horizontes productivos para consolidar una mejor proyección en el mediano plazo.
Santa Cruz apuesta a la licitación de 10 áreas revertidas por YPF
El panorama de San Jorge termina de mapearse este año con el proceso licitatorio en Santa Cruz, que aprobó una Iniciativa Privada impulsada por 7 empresas, que ofrecieron 1.200 millones de dólares a invertir en 6 años, más un canon de ingreso de 15 millones de dólares, para quedarse con los 10 boques devueltos por la operadora de bandera.
El resultado se conocerá el próximo 20 de octubre y si hay nuevos oferentes interesados, deberán superar las condiciones descriptas. La apuesta expresada por el ministro de Energía, Jaime Alvarez, es levantar en lo inmediato al menos un 20% de la producción, mediante un pan intensivo de reparación de más de 2.000 pozos actualmente paralizados.
La Cuenca San Jorge no compite con Vaca Muerta en escala ni en rentabilidad, pero puede sumar aporte estratégico. El petróleo de esta región sigue siendo necesario para la mezcla en las refinerías nacionales y si logra reducir sus costos (hoy entre 50 y 60 dólares por barril), tendá nuevas oportunidades.
Ese puede ser el camino para que, en la gran vidriera de la energía argentina, la cuenca más antigua del país siga teniendo un lugar central.